Hotel Quinta Fabiana

Estoy muy decepcionada y triste del resultado de esta experiencia. El restaurante, la cata y las habitaciones son buenos (malos olores de aguas residuales al rededor). Al ir en un grupo de mujeres jóvenes fuimos DISCRIMINADAS Y MALTRATADAS desde la reservación, hasta la planeación de este viaje (que era una despedida de soltera de relax) por la gerente. Entre la gerente (de la que recibimos mayor maltrato) y la recepcionista (que es mucho mejor en el trato al cliente) hay muchas fallas de comunicación y no pueden comunicar con claridad sus políticas. Rara vez contestan el teléfono de la recepción y a los mensajes les dan seguimiento entre varias personas, lo cual hace las interacciones aún más desconcertantes. Algo aún más grave es que varias de nosotras les escuchamos hablar mal de nuestro grupo desde el día uno que estuvimos ahí hasta que nos fuimos. Somos todas mujeres con alta carga de trabajo por lo que no nos interesaba llegar a hacer relajo, sino descansar y desestresarnos. Cuando llegamos nos dijeron que podíamos consumir nuestras propias bebidas (no se habló de botana) únicamente en la habitación y afuera descorche, seguimos la regla, consumimos bastante de bebidas y alimentos del restaurante, con un muy buen servicio de su parte (aunque a veces parecían estar hartos de que estuviéramos pidiendo de acuerdo a cuando queríamos tomar algo porque era muy cansado para una sola mesera trasladarse del bar a la alberca). Por otro lado, cuando fui a preguntar de la dinámica de la cata, la gerente pareció empeñarse en decirme que lleguemos 10 antes de la hora porque otro grupo (de dos personas) se uniría, como preeviendo que eramos unas salvajes impuntuales, llegamos a tiempo y no había nadie ahí, y más bien su otro grupo" fue el que llegó después. A pesar de que nos tomamos el tiempo de planear todo con detalle y responsabilidad primero nos dieron un brochure donde decía que nuestros masajes venían incluídos

A constant struggle to get what you paid for.Lobby never picks up, their manager has a very big mouth for such a small will to help.I will never ever bring my clients back to this place, it did not only was an unpleasant experience but it might cost me dearly since my customers left with a very sour experience, this was definitely a terrible mistake.Their manager has the guts to run to the street yelling at people while the other employees just watch and laugh about it! Unbelievable! people.

El lugar está hermoso, pero es una lastima es pésimo servicio que dan, además de que su publicidad es engañosa.Escuchamos al personal hablando mal de los huéspedes.La gerente es super prepotente y de muy mal trato.

Pésima experiencia en este lugar. Los jabones huelen a podrido (no los cambian, ni los rellenan), había un despertador programado a la 1 de la mañana en la habitación que no dejó descansar. En uno de los baños de la habitación había un cartel de fuera de servicio

Una experiencia totalmente placentera.El lugar esta espectacular, la comida deliciosa cada uno de los platillos. El masaje relajante, realmente relajante.Pero lo realmente grato fue el trato tan calido y la actitud de servicio de todo el personal, desde la mesera muy amable, el joven de mtto (Leo) bastante servicial, sobre todo muy agradecido con la actitud y el enorme apoyo de la Srta. Mariana en todo momento. Espero le sea reconocido.Lo recomiendo total y ampliamente, no se arrepentiran.

Bonitas instalaciones, comida diferente y muy rica, precios decentes. Algunos elementos a mejorar como los jabones y shampoos.Y definitivamente mejor trato de la gerente y servicio al cliente.Sugerencia definitivamente mayor capacitación de manejo de expectativas del cliente.

Pésimo servicio administrativo. Llevo dos meses esperando reembolso por parte de Quinta Fabiana y no me han dado resultado. Es un hotel bastante caro para el servicio que ofrecen.

Una experiencia increíble. La habitación Champagne espectacular. El restaurante con comida deliciosa (el pulpo uff lo mejor) y el servicio de todo el personal de maravilla. La gerente muy linda y atenta. Todo en verdad fue genial.

Discriminación de clientela. Parece que solo tratan bien a las parejas pero a los grupos de personas nos tratan como clientes de segunda.La gerente es prepotente y grosera. Escandalosa y sin ningún animo de atender y brindar servicio.Lleven su dinero a otro lado.

El lugar es muy bonito y tranquilo. La comida es buena y la atención por parte de los meseros fue excelente. La cata fue decepcionate, solo nos dieron a probar un tipo de vino, y el precio me pareció elevado para lo que ofrecen. La información que proporciona el hotel es cambiante y contradictoria. Ante un malentendido recibimos un trato por parte de la gerente verbalmente agresivo y poco profesional. No repetiría la visita.